viernes, 30 de octubre de 2009

De las cosas lindas.

El desempleo (voluntario) es incomparable.
Por supuesto, esta frase no viene sola. Hay que haber trabajado bastante
para poder disfrutar al máximo las mañanas de no-trabajo.
Me creo en lo cierto cuando afirmo que es una de las situaciones más privilegiadas,
no es joda levantarse a las diez, subir la persiana, desayunar cereales y jugos, y leer los libros de Shakespeare en la cama. Pobre William, él no escribió para ser leído bajo un ventilador de la calle Aguirre, pero qué más da. Es todo una experiencia leerlo en voz alta, acostada.
Y bueno, las cosas son así. Varela Varelita los jueves mañaneros, después de terapia, ay, es mi día preferido, el otro día tomé el licuado de banana mejor preparado de la historia. Proporción justa de azúcar, jarrita verde que permite rellenar el vaso, y viento fresco entrante por el ventanal. Qué gran época del año! y ni hablar si uno vuelve por Malabia en bicicleta, tiene las mejores bajaditas de la zona.
Nunca estuve tan al día con mis estudios, nunca tan buenas notas, nunca nada como esto.
En verdad, encontré algo que busqué por mucho tiempo, resignando otras cosas, pero bueno, nada viene sin etiqueta.
No sé bien qué quise decir con "etiqueta", pero algo así como nada es gratis.
En los últimos días se me presentó un dilema. Dos.
Uno) Mis amigos se van de vacaciones, a hermosos lugares del mundo, muchos ya con pasajes, otros en plena planificación de retiro, o lo que es peor (para mí), Ezeiza.
Y yo, divino mi licuado de banana y las notas de filosofía y letras, pero me quiero subir a un micro con mi mp4 (digresión: mi amiga lau se fue a ny y yo, en un acto de amor profundo, le presté mi pequeño tesorito violeta, simplemente quiero dejar constancia), y dos) no tengo plata, porque no tengo trabajo, porque tomo licuadito de banana.
Volvemos al tema de las etiquetas, todo viene de la mano con algo. Volví a no ser clara, creo.
Cuestión:
ojalá alguien me regale para mi cumple,
un viaje desde el mundo del desempleo, hasta Bolivia, sin escalas.

No hay comentarios: