martes, 31 de agosto de 2010

Opinión mía

Es tan perfecto
que debería llamarse
"Pavo Irreal" 


Acordes Personales.

Ya cumplí un gran desafío: manejar. Ahora mi norte es la guitarra y la lengua portuguesa. Quizás en el 2011 ya pueda tocar y cantar canciones de Caetano, mientras manejo. Voy a ser una especie de freak circense.

Kim ki Duk ya lo dijo.

Voy despidiéndome de Agosto con la sensación que sólo este mes sabe dejar en el cuerpo: un cansancio muscular mayor al habitual y un color verdoso en los miembros. Agosto transcurre como un torbellino de sueño y polvo; es más largo de lo que todos quisiéramos. Termina, por suerte, con la ilusión de un septiembre floral y campante. Sólo la ilusión de la llegada de Septiembre es lo que hace que Agosto transcurra. El motor estacional es el porvenir primaveral. Menos mal que contamos con la imaginación y con el tiempo futuro; menos mal que contamos con las cuatro estaciones.

lunes, 30 de agosto de 2010

Vagancia.

Mi memoria es más selectiva de lo que quisiera. Todo lo anterior a los 18 es difuso. Creo que casi todo lo posterior también.

Lo que mata es la pluralidad.

Mucha gente lee y relee sus libros preferidos. Yo los admiro. Pero no tengo la costumbre. Porque, hay tantos libros por leer, que me da ansiedad. Cuando re-empiezo uno ya leído, digo: ¿pero en qué momento leo todos los que todavía no leí? Y digo, ¿los que releen, no sienten culpa por la potencia de las nuevas letras? Definitivamente, existe gente más sana que yo. Por estas cositas hago terapia.

La segunda es la vencida.

Me gusta ver películas, en general. Me parece un gran plan. Pero sólo cuando las veo por segunda vez, siento que las interiorizo. De otra manera, sólo las veo.

domingo, 29 de agosto de 2010

Intimista.-

La gente cuando está en grupo suele caerme bastante peor que la gente cuando está sola. Cuando pasa lo contrario, me sorprendo. (Nunca me pasó).

Casi tautológico, pero no.

La ignorancia también es conocimiento. Conocimiento sobre la ignorancia.

De grandes

Ya no jugamos a los "palitos chinos".

Oda elemental

La terraza de mi casa tiene piso verde y mucho cielo arriba. La terraza funciona como plaza, como playa, como planetario personal. Allí se sube con el diario del domingo, cualquier día a la semana, a tomar tranquilidad. Y si hay sol, también sol. Las lamparitas de colores se colocan en épocas navideñas, que ya vendrán.
La terraza de mi casa sólo la usa el primer piso. Por suerte el edificio tiene dos pisos, y una terraza.

Promesas

Mañana es promesa. Un beso es promesa. Los viajes son promesas. La primavera es una promesa. Una sorpresa es una promesa.
Sorpresa y promesa son casi la misma palabra.

sábado, 28 de agosto de 2010

Las cosas como son II

Basta. El "¿todo bien?" carece de sentido alguno. De ahora en más, siempre "¿cómo estás?". Y permitir el: "como el culo", "todo como el culo".

Imagen que se contrapone con el texto o duplica el mundo.



ZOOM
El espejo, ¿es hedonismo puro o realmente necesario para el auto-conocimiento del hombre?

Sea como fuere, de no existir, todos tendríamos más desarrollada nuestra capacidad artística para la pintura. Nos retrataríamos unos a otros. Lo haríamos de forma frenética y compulsiva: a la mañana, antes de salir al trabajo; después de comer, para ver si nos quedó comida entre los dientes; al levantarnos de la siesta, así sabemos cuán despeinados andamos. Consecuencias inmediatas: grandes gastos en óleo, calambres sistemáticos de muñecas, inestabilidad laboral debida a la constante disponibilidad necesaria para el retrato. 

Señales:

Creo en ustedes. Disfruto cuando aparecen. Me gustan, me hacen sentir que la vida es sorpresa, es incomprensión, es coincidencia y gracia.
(y a veces me dan bronca, pero son las menos).

Lápiz de labio.

Pidieron la "promo 2": café con leche con tres medialunas y un cortado, aparte. Así compartían las tres, porque ella no tenía tanto hambre. Charlaron y leyeron sus apuntes. Resaltaban, subrayaban, anotaban. Él se levantó y fue al baño. Ni bien dejó de estar al alcance de la vista, ella sacó de su cartera un necessaire rosado y tomó con sutileza un lápiz labial rojo apagado. Pintóse la boca de manera cuidadosa y sutil. Él volvió. Se sonrieron y se tomaron de las manos. Al salir del bar, él también tenía cierto color sobre sus labios.

jueves, 26 de agosto de 2010

Silencio final.

Cada año se hace más corto con el paso de los años.
Quizás cada año en nuestras vidas sea, efectivamente, más corto.
Quizás la muerte consista en eso:
el momento en el cual ya tan cortos son los años que dejan de ser.
Dejamos de ser, como los años.
Meses a días,
días a horas,
horas a minutos,
minutos a segundos.
Y nos vamos, sintiendo que el tiempo pasa rápido.
Porque cada vez pasa más rápido.
Porque pasa.
Pasa.
A.

Muchacha Picapiedra

Comer con las manos es siempre más rico.
Es más rico porque no se puede. Como todo.
Lo que no, sí.

Casi.

Estaba caminando tan rápido que no pude detenerme. Me di cuenta, pasitos más adelante, de que saludarte era lo que más quería en el mundo. Esa expresión es muy tuya. "Lo que más quiero en el mundo", dicha con una insignificancia divina y personal. Por ejemplo, -¿puedo hacer un te?, - Es lo que más quiero en el mundo. Qué lindo.

Irritaçao

Minha professora não quer dar classes, mais eu quero aprender.

martes, 24 de agosto de 2010

Del otro lado.



Los mosquitos llegan a eso de las seis de la tarde.
Seguramente, antes estaban en China.

Descubrir un mundo

Los patos son animales especiales. No entiendo bien porqué, pero últimamente hablo mucho de los patos. Hoy fui a correr. Fui a correr al lado del lago y el lago estaba lleno de patos blancos. Los patos hablaban entre ellos y, de vez en cuando, me hablaban a mi, gritando, soberbios, aleteando sus cuerpecitos de pato.
Dicen que cuando terminás de correr, no hay que parar del todo, así el corazón baja despacito el ritmo. Caminando, entonces, fue cuando descubrí esto: que los patos, además de volar alto, duermen todos juntos, en la copa de los árboles. El árbol bien verde tan lleno de patos blancos. Los patos, por tanto, son superhéroes de la noche; son menos patos de lo que yo creía. Para mi pato siempre fue un animal ganso. Ahora entiendo que no. 

lunes, 23 de agosto de 2010

Pies más felices

Civilizados y descalzos parecen oponerse. Pero, ¿no podemos restarle dramatismo a la situación y andar todos un poco en patas? Es de las mejores sensaciones, de las mejores liberaciones; sacar los envoltorios, sacar las telas pesadas, sentir aire en los dedos, respirar nuestros pies desde el suelo.

Nada es nuevo aunque parezca.

Qué difícil es inventar algo. En el segundo piso- escenario profético de pensamientos incesantes- consideramos que todo ya fue dicho: en primera instancia por los antiguos filósofos griegos, y luego, ya representando al mundo contemporáneo, vino Jorge Drexler a cantarnos nuevas verdades sobre el amor y la vida. Nada podemos los demás mortales más que aprender de Platón, Aristóteles y Drexler e intentar reformularlos sin caer en el plagio. 

domingo, 22 de agosto de 2010

Lindo


Schatzky 100%

Las únicas cosas que me salen realmente bien son las que me encantan. Lo otro es malabarismo puro.

¡Que se vayan todos!

El domingo es muy domingo. Guacho total.

sábado, 21 de agosto de 2010

Comparación con el mundo.

El mundo se deja ver unos días más que otros. Yo también.

Cansancio Profundo.

Me desperté de dormir y dormí. Salí un rato. Volví a dormir. Comí algo y me quedé dormida. Tengo miedo de no estar escribiendo, quizás todavía sigo dormida.

Suspiro

Ay, agradezco los días como hoy, llenos de aire en el aire. La felicidad de volver a las dos ruedas, de sonar mi bocina en esquinas despejadas. Qué rica y suave la sensación del aire tibio sobre la piel.

viernes, 20 de agosto de 2010

Mi adaptación

Nunca entendí a la gente que se saltea comidas. Que se olvida de almorzar. Que cena liviano. Que almuerza fruta o yoghurt. Que se vuelve inapetente con la angustia. O con la felicidad. En mí, comer acompaña cada una de las sensaciones, cada uno de los actos. Como, luego existo.

Acá no hay alumnos, hay compañeros.

Empecé hoy un seminario de la facu llamado algo así como "filosofía, educación y cultura popular latinoamericana". Un delirio simpático de esos que aparecen en la oferta y, sin entender demasiado en qué me estoy metiendo, cuando me quiero dar cuenta, es el momento de entregar la monografía final. Cuestión que, como el título lo indica, el seminario es una gran asamblea de hippies que militan en bachilleratos populares y estudian, además, recreación y tiempo libre. En la primera clase, votamos hasta para ver qué votamos. Salí mareada; faltaba pintar pancartas, hacernos una bandera y hubiésemos podido salir a marchar desde Puan hasta Plaza de Mayo por alguna de todas las causas dignas de ser marchadas.

Teorías psicoanalíticas problemáticas.

Si es verdad que los ojos miran con el deseo,
estoy perdiendo, lentamente, la capacidad de desear.
Eso me preocupa mucho más que la miopía.

Siguiendo la lógica...

...si un médico, medica. Si un conductor, conduce. Si un actor, actúa. Si un vendedor, vende. Entonces, ¿un ingeniero se las ingenia? Estamos jodidos.

miércoles, 18 de agosto de 2010

Se entiende, creo.

Des-beneficiar no es lo mismo que perjudicar. Todo depende del ojo que mire el vaso. O del brazo que mida el ángulo. O de la perspectiva que analice el cuadro.

Pa' Qué Más

Concuerdo con Concordia

Allá se levanta la mano y se saluda. Se menea la cabeza en señal de mutuo reconocimiento. Allá se cocina casero. Se teje. Se tienen jardines. Hay techos altos. Hay casas bajas. Hay perros. Se saluda al almacenero. Al vecino. Se le ceba un mate al puestero amigo. La abuela de Pichi tiene 95 años; hace chistes. Se vive con más tiempo y menos arrugas. La cabeza se oxida en otras dosis, eso es importante.

Concordia III


El domingo es raro en días feriados: sentimos y no sentimos esa nostalgia. Pero igual sale sonrisa por sabernos ensiestados al día siguiente, un lunes de siesta, que por ser lunes y no ser lunes al mismo tiempo tiene un plus de significado. Un plus de placer. El plus al que me refiero nos agarró de sopetón en una represa concordiense. Para mí, fue el día más feliz del viaje. Al sol, con mucha agua adelante, piedritas "canto rodado" para hacer sapito en el lago, y sanwiches de milanesa en la guantera. Nadie podía pedir más. Aunque todos siempre podamos pedir más. Así que cantamos Drexler a capella con mona, asomamos nuestras cabezas por las ventanillas del auto y nos dio el viento en los rulos. Despeinados todos, disfrutamos del pasto, del aire, incluso del fresco. Concordamos (VERBO ESPECIAL PARA HABLAR DE CONCORDIA) en que el lago en invierno es más lindo que en verano. El frío constituye la esencia del lago. En verano es menos especial, o algo así. 
Pasamos toda la tarde sacando fotos y tomando mate hasta que volvimos al centro para el infaltable paseo por la feria hippie. El recorrido fue fugaz: estábamos cansados. Sin embargo, nuestro cansancio no significó cama. Vencimos los bostezos y nos fuimos a cocinar pizzas caseras en un horno de barro. Amasamos con nuestras propias manitas. La masa se hizo bollo y el bollo se hizo pizza. Y podría seguir con la cadena pero no quiero que el blog se vuelva tan escatológico. Cuestión que los amigos de Fede resultaron tan divinos como él y todos nos fuimos a dormir con la panza llena y el corazón contento. Nunca mejor dicho. 

Sepia

Las naturaleza logra engañarse a sí misma: 
las termas le roban un rato de verano al invierno.

martes, 17 de agosto de 2010

Experiencia sociológica

Fuimos en Concordia a una juguetería a comprar un regalo para Felipe, niño de cuatro años. Después de debatir sobre las nuevas generaciones- derrochonas de celulares y tecnología digital en chiches aparatosos, niños de la era computarizada que no saben jugar ni al "chancho va"- vimos que también siguen estando presentes los clásicos de los clásicos: los famosos playmovil, los autitos de colores, las muñecas Barbie. Hasta acá todo bien, pero, en la sección femenina (era una juguetería que hacía énfasis en la categoría de género), entre disfraces y cosas color rosa, vimos un juego de escoba y pala. La escoba también era rosa. Nos indignamos.

domingo, 15 de agosto de 2010

Reflexión zoológica II

Lau dijo: "no sé si decir que son pescados o peces muertos".

Reflexión zoológica

¿Cuánto sale un elefante? ¿Cuánto sale un hipopótamo? Qué dudas tengo al respecto. No sé si hablamos de millones o de miles, eh.

Concordia II

Nos levantamos a eso de las once y empezamos con los turnos de baño. Agua caliente por dos: en la bañadera y en el termo. (Este viaje es de esos viajes donde el mate es un compañero más entre los integrantes del grupo. Viene a todos lados con nosotros y nuestros estómagos se adaptan al ritmo matero del interior (intenso, digamos)). Upa, me quedó un doble paréntesis, qué loco. Menos mal que esto es un blog y no hay reglas. Retomo:  una vez bañados y mateados, preparamos un nuevo mate más e hicimos un itinerario completito: castillo de San Carlos, Costanera, playita, casa de pichi, casa de coco, y a la noche volvimos para lo de fefo. Las chicas cocinamos (cocinaron, en verdad) y comimos en una mesa invernal: llena de platos humeantes. Pasamos por el súper "Modelo" y por la estación de servicio en busca de provisiones. También fuimos en grupete a una juguetería para comprar regalito a Felipe, el hijo de un amigo de los chicos. Compramos ladrillos y autitos. Todos contentos. Unos ratos más tarde, la casa de fefo se convertiría en la casa del pueblo. Estábamos todos al ritmo de la cumbia concordiense, algunos  con labios moraditos, otros con bastante sueño, pero todos superamos nuestros avatares y salimos a bailar. Sí, a bailar. Quisimos, efectivamente, ir a un boliche. La experiencia no tardó en recordarme por qué nunca voy a boliches. Y menos en invierno. Pero bueno, más allá del frío, la cola para entrar y pequeños episodios dentro de "My Way", logramos nuestro objetivo: interiorizarnos un poco en la noche de los pagos.  Cuando salimos, había una niebla del demonio. Un cielo de esos que recuerda a película yanqui donde todos se mueren, salvo uno. Volvimos rapidito, calentamos mucha y múltiple comida en el microondas y nos quedamos fritos. Chin pum.

Concordia I

Nos subimos al bondi saliendo todas apuradas de nuestros trabajos y llegando, entre lloviznas y tránsito, a la terminal de ómnibus. Ni bien subimos al coche cama (nivel!), se oyó rumor de gente que decía que el micro demoraba siempre más de lo que decía que demoraba. Ok. Nosotras, as always, viajamos preparadas para todo terreno: tupper repleto de brownies caseros, pack de madalenas con dulce de leche e infinitud de golosinas. El mate, así pues, tardó en aparecer lo que dura la puesta del sol (poco, muy poco). Mate mediante y panza llena, nuestros corazones atardecieron contentos viajando, una vez más, por rutas argentinas. Dormimos, charlamos, escuchamos  música, pensamos, volvimos a charlar, seguimos comiendo y cuando miramos por la ventana recién estábamos por la localidad de Pilar. Ok. La cuestión fue que varias horas después, arribábamos a la capital nacional del citrus, la ciudad más grande del Río Uruguay. Fefo nos estaba esperando, un tanto escarchado, desde hacía unos momentos. Me propuse- un tanto imponente- a manejar el auto, y nos conduje hacia la calle 9 de julio, donde nos alojaba, desde antes de abrir sus puertas, una casa de techos altos y portón antiguo de madera. Simplemente, genial. Silvia, la mamá de Fefo, nos había comprado empanadas y tartas; la heladera estaba completita, e incluso una sorpresa  aguardaba en el freezer: un tiramisú caserito. Mejor no nos podía ir. Comimos y paseamos en coche, recorriendo algunos lugares típicos, yendo de la mano de nuestro guía turístico que tanto parecía disfrutar de su rol. La primera noche se fue asírecordando películas románticas y escenas inolvidables del cine, todos cerquita de la estufa, ansiosos por explorar el nuevo suelo. Hasta mañana.                                                                         

jueves, 12 de agosto de 2010

Ayer vi un cartel que decía

Podríamos prescindir 100%

¿Quién habrá inventado la melancolía?

Para indignarse jodido

¿Qué onda el mundial de sauna? El mundo es locura.

Desconfío (XLVII)

De los que duermen con medias puestas. De los que se bañan a la mañana antes de ir a trabajar. De los que ponen el despertador en medio de la noche por la satisfacción de saber que pueden seguir durmiendo. De la gente que dice que no ve la televisión. De los que toman cotidianamente subtes. De los que toman vino blanco. De los que no duermen la siesta. De los que todavía no tienen celular. De los que no toman mate. De los que no viajan. Desconfío de los que a mi edad siguen escuchando a Silvio Rodríguez. Desconfío de los abogados. De los perros chiquitos que parecen ratas. De la torta de bizcochuelo.

Ser es Caos.

Tal era la prisa que las cabelleras se alborotaron. Las veredas se volvieron más angostas a la percepción del palpitar acelerado. La gente brotó como alcachofa por sobre el adoquín todavía tibio de la tarde. No hubo espacio sin movimiento: todo lo cubría una ola de vaivenes amontonados. Todo pasaba como una avalancha de simultaneidades: bocinas, voces, carteles, luces, sombras, nubes. Gritos, gritos, gritos. Hubo humo. Hubo humo y hubo gritos. Todo paró. Paró como no suele parar. Y de repente, dejamos de girar. Dejamos de respirar por unos segundos. Y los segundos se alargaron, se volvieron aire, se volvieron polvo, se volvieron en contra de nuestros sentidos y nos ahogamos. Después volvimos. Siempre volvemos.Y respiramos de nuevo.

Una frase bien.

Las cosas no pasan hasta que pasan.

miércoles, 11 de agosto de 2010

¿Qué te puedo cobrar?

El "oficio" está de moda, y es la posta: un plomero cobra mejor que un arquitecto.

martes, 10 de agosto de 2010

Dejar el chupete (los padres son graciosos)

A mi amiga Cami le dijeron que, al momento de desprenderse del chupete, se lo tenía que dar a los patos y la llevaron a los lagos de Palermo. Recién el año pasado se enteró de que no todos fuimos a darle nuestros chupetes a los patos. Es más, ella fue la única, junto a su hermana. La sorpresa fue harto humillante, claro. A mi se me cayó por el inodoro e hicimos una ceremonia de despedida antes de tirar la cadena. Fue el principio de mi madurez: me tuve que hacer cargo del error, y crecí. A Lu le dijeron que se lo llevaban a Carlitos Bala. Lo encontró, años después, dentro de un cajón. A mi hermana se lo arrancó el perro de mis tíos y se lo comió. Ella lloró a grito pelado y tuvieron que ir, en medio de la noche, a comprar uno nuevo. Nunca se acostumbró al nuevo. Cabe destacar, para hacer más solemne el panorama, que estábamos en Venezuela. A Sol le dieron para elegir: tirarlo, guardarlo o regalarlo. Ella eligió regalárselo a la vecina (?), que era más chiquita. (En momentos cercanos a la gripe porcina, aquello sería impensable, un crimen, un homicidio culposo). La historia que le contaron a Lau es que lo arrojó desde un cuarto piso hacia un perrito que paseaba por la calle. Todos dudamos de la veracidad de este relato, porque, qué onda, ¿no? Pero fue gracioso igual.

Cosas que no se entienden

Por qué se "contagia" la menstruación entre las mujeres en los viajes.
Por qué las mujeres tardan tanto en ir al baño. Y por qué van juntas.
Cómo hacen, ciertas minas, para caminar encima de semejantes tacones por las veredas porteñas.
En qué están pensando cuando piden coca light pero comen una hamburguesa completa.
Por qué es que les gusta el "che", pero cuando lo tienen cerca, le piden que se corte la barba. (Perdón el lugar común, pero creo que es una de las frases clisés más acertadas del planeta).
Por qué todas a los catorce años escriben tantas cartas. Tantas.
Debería ser un rol privilegiado, el mío- escribiendo, desde luego, como mujer-pero debo decir que el género me genera infinitas dudas más que certidumbres. Somos una cosa rara.

Quizás gane la lotería y eso me salve

Me di cuenta de que en los días de lluvia y frío no quiero trabajar. Pero me di cuenta de que en los días de calorcito y sol no quiero trabajar. Estoy condenada, por ende, a ganar mucha plata cada otoño, así puedo satisfacer mis deseos.

A veces pasa: el tiempo no pasa.

"En esta media hora, pasaron sólo seis minutos".

lunes, 9 de agosto de 2010

Cara y Seca

"Piola" y "Salame" son como la misma palabra pero al revés. Las dos expresiones me encantan, derrochan simpatía.

Una experiencia de la Modernidad.

Lo mejor de tener un chino cerca, es tener un chino cerca.
(Ya no se aclara que es un almacén, se sobreentiende; siempre se sobreentiende y en ese sentido, son grosos. Lograron el sobre-entendimiento social de su propio nombre; así se vuelven sujetos de doble identidad: como individuos y como encarnación de un comercio bien provisto cada cuadra y media). Sea como fuere, de todo hay mucho. Muchos chinos y muchos chinos.

Utilísima Satelital

Me vienen ráfagas de ganas de ser empleada doméstica: dedicarme a la cocina, a doblar ropa, a limpiar los vidrios, a ver la novela de las tres mientras termino mis quehaceres.

Simpleza del Ser

Vivíamos tal como vivíamos, como nos salía vivir, como no podríamos no haber vivido.Eso era todo: éramos, sin tantos embrollos.

domingo, 8 de agosto de 2010

Una opinión humilde

Hay días que tienen cosas interesantes para vivir, pero poco interesantes para escribir. Me parece bien que eso pase.

sábado, 7 de agosto de 2010

Caer bajo

Me estoy auto-plagiando en una monografía universitaria. Digo sobre lo dicho. Paso sobre mis pasos. Me miento, me digo, me siento culpable.

Mi primera cana

Mi cabeza tiene una nueva integrante: es blanca y electrizada, metálica, punk-rock, rebelde, inquieta, soberbia, albina. Es única y está solita ahí por el medio de los miles de rulos castaños.

Como yo.

Nadie nunca deseó tanto la primavera

miércoles, 4 de agosto de 2010

La patria por la rendija

Aprecio las monedas del bicentenario, pero si me quedo corta, las uso para el colectivo. No me juzguen.

L I B R E M E N T E

Filosofía caminante

Es notorio el suceso del error: cuando uno hace las cosas bien, el mundo sigue el rumbo "predecible"; hacemos nuestro trabajo, cumplimos nuestros objetivos, somos normales, lo mismo de siempre. Pero, cuando nos equivocamos, lo interesante no es sólo la equivocación, sino la situación que viene a posteriori: la chance de ser mejores, de superarnos. Saber cómo manejar el error, saber pedir disculpas y hacerse cargo del asunto de la manera correcta nos da una nueva e inesperada fortuna: la de enfrentarnos con el mundo y triunfar. Entonces, equivocarnos un poquito nos hace bien.

"Ya está"

Tenemos tantas ganas de algunas cosas, que tendemos a decretar, a decidir, a clausurar. Hoy un amigo, saliendo de una clase a eso de las siete, notó que el cielo todavía estaba celeste- ya no negro oscurísimo- y me dijo: Parece que está llegando la primavera, eh. Hoy, el día que amaneció con cero grados. Pero, qué bien, me gusta la gente que toma decisiones mentales para suavizar los avatares.

El Indio todo lo dijo

Cada día veo menos. Menos mal.

martes, 3 de agosto de 2010

El hombre (i)racional

Andamos con bufandas para no enfermarnos, tomamos Ibupirac para curarnos, intentamos curarnos para no morirnos. Somos altos fracasados.

lunes, 2 de agosto de 2010

Mitos verdaderos

Existió una vez una mujer cuyo rostro desapareció entre medio de sus propios cachetes. Estudios médicos avanzados llaman al fenómeno "autodevoracióndelyo". Dicen que hay cada vez más casos, sobre todo en el conurbano bonaerense y en Uruguay, donde la gente toma mucho mate.

Vaivén

"ni fu, ni fa, pero más fu".

Muletillas

Voy a empezar a decir todo el tiempo "es clave". A cualquier cosa que me digan, voy a contestar "es clave".Me di cuenta de que va bien con todo.

Las cosas como son.

Yo soy fan de armar pares de características que van de la mano; las mejores son: a los que les gusta el agua tónica, les gusta el caramelo media hora;  los que tienen la incapacidad para decir "dentífrico", también la tienen para pronunciar "telgopor" y ahora me arriesgo con una nueva: los amantes de los rompecabezas también son amantes de las palabras cruzadas y, generalmente, de los gatos. Uopa, triplete.

Pregunta

Todos alguna vez juntamos boletos de colectivo para la bendita silla de ruedas. ¿Alguien hizo el canje?

Dale.

Es verdad: si va a hacer este frío, si todos vamos a tener las manos congeladas, si a todos nos cuesta tanto salir de la cama, si hay nubes densas y cargadas, QUE NIEVE. Es como una provocación. Dale, Dios. No te digo como para hacer muñecos, pero al menos las callecitas llenas de blanco.

Hablando de taquicardias

Un lunes de cenita entre amigas, con este frío no podía dejar de ir en auto. Cuestión que me propongo a llevar a varias a sus casas (¿para qué manejar el auto si no?) y ni bien toco el acelerador, suena la bocina. -¡Qué coincidencia! dije yo a la primera. Pero la bocina siguió, siguió independientemente de mí y de cualquier movimiento que hiciera. Mi auto se volvió loco y empezó a protestar a los bocinazos. Para completar el cuadro, el camión de la basura adelante mío no tardó en putearme. Tuve que bajar el vidrio y explicarles, señores, disculpen, se trabó y no puedo hacer nada al respecto. Cosas que nos pasan a los principiantes, ¿no?

domingo, 1 de agosto de 2010

Taquicardia es:

Volver del viaje. Jugar al "Chin". Jugar al ping-pong. Manejar. Cruzarme en la calle con el chico que me gusta.