Toda ida tiene su vuelta. (y así la vida, no? no hay nada diferente a nada, no se si me explico, como que es todo lo mismo ,pero con diferentes formatos. El eterno retorno no es más que nuestra vida cotidiana pero alargada en toda nuestra vida).
Odio los Tuppers de Pueyrredón y corrientes.
Y la plaza once me trae una nostalgia
como un tango, cansado, sucio
desprolijo, vomitando asfalto
y yo solo quiero una hamaca paraguaya.