Se conocieron haciendo cola en el almacén chino. Él estaba adelante. Ella tenía el tapado arriba del pijama. Él pagó en efectivo dos cervezas y una bolsa de pan. Ella tenía un canastito lleno (chocolinas, medallones congelados, rollos de cocina, una lata de atún, un paquete de velas). Él salió del almacén sin verla. Ella dejó el canasto y salió detrás. Lo siguió hasta la esquina, lo siguió cada vez más de cerca. Y cuando finalmente él se dio vuelta, ella dijo:
-Creo que gusto de vos.
1 comentario:
los quiero
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