viernes, 7 de septiembre de 2012

Subjetividades I

El viernes me tomé un taxi que duró, en total, unos ocho minutos de recorrido.
El taxista en tan escaso tiempo logró comentarme algunas cositas. Empezó por contarme que tenía una hija.
-ah- dije yo.
-La madre me la dejó en brazos cuando tenía cinco días y no volvió nunca más. Yo me quería morir pero no podía hacer otra cosa que cuidar de esa criatura. Hoy tiene 26 años y tengo otros dos más chicos. Los tuve con otra mujer que también me abandonó. Por suerte ahora la vida me sonríe: conocí al amor de mi vida,
-ah- de nuevo yo.
-Sí, ella es hermosa, pero pobre: es adicta a la cocaína. Ahora está internada y no la dejan salir ni por un minuto de la habitación. El otro día la fui a ver y cuando me iba me apuntó al cuello con un cuchillo, porque pobre, quería irse conmigo. Casi me mata pero por suerte no pasó nada.
-ah-
-Mirá el mensaje de texto que me mandó: "te amo no me olvides", ¿no es un sol? Qué linda es la vida.

1 comentario:

Airdish number dijo...

"Esta sí que no me deja..."